martes, junio 08, 2010

Hola,
hace un tiempito escribí esto, sin darme cuenta que al no colgarlo en el blog a tiempo, perdería su punto, y ahora sólo parece una obsesión por los meses luego que han pasado...  irónico, ¿no?
Y bueno, he reflexionado en cómo pasa el tiempo y sus efectos imperceptibles a corto plazo. No suelo explicar lo que escribo, no me gusta, siento que es atar la imaginación de quien me lee a mi perspectiva, y cada uno tiene el derecho de darle el sentido que quiera, o no darle ningún sentido del todo... libre albedrío.
Pero Este en específico es diferente y especial a la vez (sin quitarle lo único, de cada cual) por que deriva de mi conciencia de saber a Dios en todas partes. Es decir, es en sí mismo todo: aire, madera, pasos, gestos, plumas, hierro, tiempo, agua, besos, tierra, lodo, dedos, dentro, fuera, arriba, abajo, toda nomenclatura, todo lo que conocemos y lo que no, tangible e intangible... Incluyéndote a ti. Entonces, esto significa que cuando respiras, inhalas a Dios; vas caminando por Dios, con tus dos Dios, cuando comes, ingieres a Dios para nutrir a Dios, tocas con Dios, abrazas a Dios... Creo plenamente que saber (o recordar) esto es reivindicar tu divinidad. Reconectar.
Creí que la explicación valía más que el poema. Espero les brinde el momento que me brindó a mí al escribirlo.
Venus.


Marzo

Llegas marzo
con tus minutos sostenidos
apaciguando la sensación de vértigo
que dejó febrero y sus veintiocho…

Calando los niveles de mi esencia
… si es que existen tales niveles.
¡Cómo todo pasa!
… y ahora entras tú
a poner en orden este rompecabezas
atolondrado que ninguno compone…

Y tengo Fe, ¿sabes?
Creo que lo resolverás todo en tus treinta y uno;
¿qué si no?, tal vez abril te eche la mano…
siempre dispuesta, en su cuaresma…

Y aún espero al ruiseñor y sus alas vertiginosas
a decirme que me has escuchado y que Tú
como la luz,
como las flores y los besos
Todo lo puedes…
viniendo a decirme que finalmente,
vendrán mejores tiempos.

Que consagrarás tus setecientos cuarenta y cuatro horas
a enmendar errores nuestros, siempre nuestros…

Y no sé… a veces me da miedo,
porque, ¿qué eres en sí?
Conjunto de días. Pero ¿y qué son los días?
Si, si. Lo sé... pero aún las horas, minutos, segundos ¿que son?
... entiendo, entiendo. Entonces, ¿qué es el tiempo...?

...Palidezco con la noche
Atravieso el umbral de mis dudas.
Sonrío. Comprendo.
Yo vivo eternizada en el vaho de tu amanecer.

--
Venus Patricia #DíasFelices

No hay comentarios: